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10 problemas empresariales comunes y cómo solucionarlos

 

 

 

Como en todos los ámbitos, los negocios y las empresas no están exentas de conflictos. Todos quisiéramos que cada decisión fuera correcta, que los clientes siempre estuvieran satisfechos y que los equipos de trabajo colaboraran en un buen ambiente. Sin embargo, existen situaciones cuyo control está fuera de nuestras manos y no podemos evitar.

 

Pero esto no significa que estemos imposibilitados para solucionarlos. Por el contrario, es responsabilidad de los líderes de una empresa hacer frente a las limitaciones y situaciones que ocurran. Y hoy te diremos cómo hacerlo.

 

Revisemos 10 problemas comunes en el mundo empresarial y de negocios y la forma en la que pueden solucionarse 20 escenarios cotidianos.

 

10 problemas más comunes en una empresa

 

1. Problemas organizacionales

 

La buena organización es una de las ventajas más importantes que puede tener una empresa. Cuando las estructuras jerárquicas son claras y cada miembro de la compañía conoce sus funciones es menos probable que haya problemas o que una falla derive en una complicación seria.

 

Gestionar las agendas, funciones y relaciones de toda una plantilla representa un gran reto y es común que surjan situaciones que pongan en jaque la buena organización. Veamos dos problemas organizacionales comunes y la forma en la que se pueden resolver.

 

Deficiente flujo de operaciones.

 

Uno de los peores enemigos para cualquier empresa es la falta de líneas de flujo claras para el cumplimiento de tareas específicas. Esto ocurre, por ejemplo, cuando un cliente se comunica con una demanda específica a una empresa, pero los gestores de atención no saben a dónde redirigir la solicitud. El resultado: el cliente termina dentro de un bucle en el que no encuentra una solución a su problema.

 

Asimismo, un deficiente flujo de operaciones puede hacer que se pierda el rastro de una solicitud y no haya un seguimiento adecuado para cada expediente. Esto puede provocar que el cliente perciba un mal servicio y se quede con una mala imagen de la empresa.

 

¿Cómo solucionar este problema?

 

Una forma de enfrentar un deficiente flujo de operaciones es mediante la definición de jerarquías y la delegación de responsabilidades a un equipo de trabajo específico. Si todos los equipos saben qué función desempeña cada miembro será más fácil canalizar situaciones concretas para obtener una rápida y acertada respuesta.

 

Por otro lado, si se trata de la gestión de procesos no importa si hablamos de una gran empresa o de un pequeño negocio, el uso de un software administrativo, puede ayudarte a mantener orden en la información de tus procesos.

 

Incumplimiento de procesos.

 

Otro de los problemas organizacionales a los que se puede enfrentar una empresa es el incumplimiento de procesos. Esto ocurre cuando, aun teniendo un flujo operativo definido para cada tarea, no se realiza un paso que compromete el resultado final de la operación.

 

El incumplimiento en alguno de los procesos puede provocar la pérdida de un cliente, el retraso en la obtención de un resultado esperado o incluso comprometer la seguridad en el espacio de trabajo. Por ello es esencial responder rápidamente cuando se detecta una falla.

 

¿Cómo solucionar este problema?

 

Si bien identificar la omisión dentro de un flujo de operaciones puede ser sencillo, establecer responsabilidades puede ser complicado cuando no se han delegado funciones específicas para cada miembro de la plantilla. En estos casos, los jefes de área son responsables por la omisión, ya que ellos supervisan ese proceso.

 

Por esa razón, los software de gestión empresarial son alternativas ideales para monitorear el desempeño de los colaboradores de una empresa. Con estas herramientas puedes identificar fácilmente quién, cuándo y cómo ha gestionado algún paso; esto hace más fácil evaluar su desempeño y contar con evidencia para mejorar el flujo operativo y evitar que ocurran percances en el futuro.

 

2. Problemas financieros

 

Los problemas financieros son situaciones que ninguna empresa quiere atravesar. Al final del día, el objetivo de un negocio es ser rentable y obtener ganancias, por lo que una baja en las ventas o una pérdida importante pueden derivar en una crisis contable o poner en peligro la subsistencia de la compañía.

 

Para gestionar las finanzas de una empresa no basta con tener el personal adecuado, sino que es necesario que todos los miembros de una plantilla trabajen en la misma dirección, bajo los mismos parámetros y objetivos. Solo los esfuerzos conjuntos podrán generar ganancias para la empresa. Pero incluso en estos escenarios pueden ocurrir eventos que pongan en crisis a las empresas; revisemos algunos.

 

Disminución de ventas

 

Una de las cosas que más puede desestabilizar a una compañía es la disminución en las ventas, sin importar el tamaño de una empresa. Si vendía en grandes cantidades, una baja en sus operaciones comerciales puede significar la acumulación de mercancías, el abandono de proyectos o la falta de financiamiento para ciertas operaciones. Si la empresa vendía apenas lo suficiente para mantenerse a flote, lo más seguro es que una baja en las ventas conlleve la adquisición de deudas o la falta de solvencia para seguir operando.

 

A pesar de que todas las empresas deben estar preparadas para estas situaciones, la realidad es que existen fenómenos imprevisibles que pueden detonar la disminución en el interés de los clientes, limitar sus capacidades económicas o hacer que tu oferta ya no resulte rentable. Estos fenómenos pueden ser desastres naturales, eventos sanitarios, crisis económicas o problemas sociales. 

 

¿Cómo solucionar este problema?

 

La mejor forma para afrontar este tipo de eventualidad es mediante el uso de la razón y el pensamiento lógico; a fin de cuentas el aspecto financiero de tu empresa se basa en números. Una opción para superar la crisis es crear ofertas, promociones o descuentos que te liberen del stock detenido y que incentive a los clientes a adquirir tus productos o servicios.

 

Estas reactivaciones deben ir acompañadas de un buen plan en el que hayas calculado los costos generados por la baja en ventas y que evalúes cuánto dinero puedes recuperar (o, incluso, ganar), aun cuando bajes tus precios. Con el tiempo podrás restablecer tus precios y aprovechar algún cambio en el mercado que te resulte benéfico.

 

Por otro lado, y adicional a tener un buen plan, también es importante contar con las herramientas necesarias para llevar a cabo una correcta gestión de ventas. El software comercial de CONTPAQi es una potente herramienta de ventas que ayuda a las empresas a agilizar su proceso de ventas y aumentar su eficiencia comercial. Proporciona un conjunto completo de herramientas para ayudar a los equipos de ventas a gestionar sus clientes potenciales, realizar un seguimiento de su rendimiento y cerrar más acuerdos.

 

Inconsistencias contables

 

Otro problema financiero al que se puede enfrentar una empresa ocurre cuando existen inconsistencias en los números de la compañía. Tal vez haga falta hacer un pago al fisco y tengas dinero de sobra o bien puede que tu dinero sea menor al reportado debido a que se han hecho retiros no registrados.

 

Esto puede ocurrir por motivos tan simples como errores humanos o por actos mucho más graves como el fraude. Lo importante es identificarlo.

 

¿Cómo solucionar este problema?

 

La mejor forma de prevenir inconsistencias contables es mediante el uso de herramientas de software para contabilidad que registren cada movimiento dentro de tu organización y donde mantengas el control de tus ingresos y egresos; incluso podrás optimizar tus pagos fiscales, así como a trabajadores y proveedores. De este modo no deberán existir fallas.

 

Otra forma de prevenir inconsistencias es mediante las auditorías internas. Bastará con que lleves a cabo cortes periódicos para saber si el control de tus finanzas es adecuado y auditar tus números anualmente para corregir errores y mejorar tus procesos.

 

3. Problemas administrativos

 

Los problemas administrativos son situaciones que afectan directamente la estructura de las empresas y pueden producir efectos negativos en el corazón de tu organización.

 

Estos problemas tienen que ver con la gestión corporativa e impactan directamente en la conformación de la cultura de las empresas. Veamos algunos de los problemas administrativos más comunes.

 

Falta de actualización

 

Hoy en día las empresas enfrentan una situación que nunca antes había estado tan pronunciada. El rápido progreso tecnológico hace que las compañías tengan que estar actualizadas todo el tiempo, pero muchas veces la falta de presupuesto, de personal experto o de capacitación puede ser un obstáculo para mantener competitivas y a la vanguardia a las empresas.

 

Esta falta de actualización puede derivar en elevados costos para el mantenimiento de sistemas, una mala imagen de la marca o hasta la pérdida de clientes debido a la existencia de ofertas más eficientes en el mercado.

 

¿Cómo solucionar este problema?

 

La respuesta a esto es tan simple que parece obvia: la mejor forma de afrontar la falta de actualización es poniendo a la vanguardia a tu empresa. Pero que la respuesta sea simple no significa que alcanzar el objetivo sea sencillo, pues la actualización de una empresa depende del presupuesto disponible y de las habilidades de su personal.

 

Es recomendable que elabores una lista de prioridades y actualices de inmediato tu empresa (si cuentas con los recursos puedes hacer una completa transformación digital de tus procesos). Si no, tal vez tu mejor opción sea actualizar procesos poco a poco e integrar personal capacitado o más joven paulatinamente.

 

Falta de visión a futuro

 

La falta de visión puede parecer a algunos un problema secundario frente a la pérdida de clientes o la baja de ventas, pero en realidad no existe nada más grave para una empresa que no contar con objetivos claros. Estas metas son el motor de todo proyecto y cuando faltan pueden comprometer las operaciones y hasta la existencia de las compañías.

 

Si los trabajadores no tienen un propósito y los líderes parecen remar hacia diferentes puertos, lo más seguro es que la empresa se perderá o nunca tendrá un crecimiento real.

 

¿Cómo solucionar este problema?

 

La mejor forma de enfrentar esta situación es mediante la creación de una cultura empresarial sólida. Pregúntate qué busca tu negocio, dónde quieres verte a ti y a tus colaboradores en el futuro y qué te impulsó a llegar hasta aquí. 

 

Si a esto le añades la opinión de tus equipos, podrás crear un conjunto de valores, visión y misión compartidos que harán que tu empresa se enfoque en un futuro plausible.

 

4. Problemas de comunicación

 

La comunicación es el núcleo de todas las relaciones sociales. Y ya que los negocios son una forma de relacionarse entre personas, clientes y empresarios, la comunicación está en el centro de todos. Pero debido a que somos personas con habilidades e intereses personales distintos, es común que haya problemas de comunicación dentro de las empresas.

 

Algunos datos revelan que el 86 % de los líderes y empleados han percibido que la falta de comunicación es una de las causas de fracaso en los proyectos empresariales. Esta carencia puede limitar la colaboración entre tu personal y tu interacción con los clientes, o incluso crear problemas operativos. Veamos qué tipos de problemas de comunicación pueden surgir en las empresas y cómo afrontarlos.

 

Fallas en la comunicación vertical

 

Al hablar de comunicación vertical hacemos referencia a la interacción que ocurre entre los niveles jerárquicos de una empresa: personal con líderes de departamento, líderes de departamento con directivos, directivos con socios, etc.

 

Los problemas surgen cuando no hay una buena comunicación y no se transmiten correctamente los mensajes que vienen «desde arriba» (o viceversa). Cuando esto ocurre pueden surgir malentendidos, efectuarse procesos de forma inadecuada o dar un mensaje incorrecto a los clientes.

 

¿Cómo solucionar este problema?

 

La comunicación vertical depende en gran medida de la forma en que esté estructurada una empresa. Sin embargo, algo que todas las compañías pueden implementar es la creación de minutas para cada reunión, en donde se dé testimonio de los acuerdos y todos tengan evidencia de los compromisos adquiridos. 

 

Para hacer estos formatos puedes apoyarte en el personal administrativo o bien aprovechar sistemas de comunicación inteligente que transcriban las conversaciones de forma automática.

 

Fallas en la comunicación horizontal

 

Por su parte, las fallas en la comunicación horizontal ocurren cuando los miembros de un equipo de trabajo se enfrentan a complicaciones para colaborar entre ellos o para transmitir las ideas entre sí. Estos problemas suelen ser producto de controversias o luchas de poder entre colegas, intereses personales o falta de compatibilidad.

 

A pesar de que estos factores son inevitables en la convivencia humana, no prestarles atención puede traer problemas serios a las empresas, como baja en el rendimiento o en la calidad de aquello que la empresa vende.

 

¿Cómo solucionar este problema?

 

Hoy en día los negocios se caracterizan por ser más colaborativos, por lo que todas las empresas deben invertir recursos y tiempo para que todos los miembros de una empresa participen activamente en las tareas comunes. Es importante capacitar al personal en materia de trabajo colaborativo y dar seguimiento a los problemas internos.

 

También puedes utilizar herramientas para la comunicación empresarial, como Microsoft Teams, que mantienen centralizadas todas las interacciones entre tu equipo y hacen más sencilla la realización de proyectos, incluso cuando haya limitantes de convivencia.

 

5. Problemas de marketing

 

Otro tipo de problemas a los que se suelen enfrentar las empresas corresponde al marketing. Una empresa puede tener muy claro qué quiere comunicar a su audiencia, pero cuando los consumidores no entienden su mensaje puede ser realmente frustrante.

Superar los problemas de marketing es esencial para hacerse de un nombre en el mercado, vender y crecer como organización. Revisemos algunas contrariedades comunes de este tipo.

 

Fracaso de una campaña de marketing

 

¿Alguna vez has hecho un estudio de mercado muy completo, has invertido en contratar a un actor famoso y has creado una campaña de marketing espectacular, pero tu público no ha mostrado interés en ella? Esta es una de las grandes frustraciones que cualquier experto en marketing podría vivir, pero también es un serio problema para las empresas.

 

Cuando una campaña de marketing fracasa, es común que esto implique la pérdida de una importante inversión de recursos e incluso que se genere una imagen desfavorable de la marca.

 

¿Cómo solucionar este problema?

 

Algunas veces el fracaso de una campaña de marketing no tiene que ver con que el trabajo haya sido deficiente, sino que simplemente el público cambió repentinamente o el estudio no fue exhaustivo debido a sesgos imprevisibles. La mejor estrategia en estos casos es aprender de los errores y seguir apostando por la opción más prometedora. 

 

Para mejorar tu pronóstico para futuras campañas, puedes evaluar la creación de dos opciones igualmente buenas y probarlas con un público más diverso y numeroso. Si además escuchas su retroalimentación antes de lanzar tus anuncios, lo más seguro es que en esta ocasión des en el clavo.

 

Adicionalmente, contar con las herramientas adecuadas te ayudará a ejecutar tus campañas de marketing de manera más eficaz. Con algun software te permitiras racionalizar tus esfuerzos de marketing y asegurarte de que todo funciona correctamente. También te brinda la posibilidad de realizar un seguimiento analítico para ver el rendimiento de tus campañas y hacer los ajustes necesarios.

 

Además, puedes gestionar las relaciones con los clientes y crear experiencias personalizadas para ellos. Por último, puedes utilizar la herramienta para automatizar ciertas tareas, como las campañas de correo electrónico, de modo que pueda centrarse en otros aspectos de tu negocio.

 

Mala imagen de marca

 

Otro problema común de marketing ocurre cuando una marca se ha hecho de una mala imagen. No importa si ha sido por alguna mala decisión en el pasado o si su reputación se haya visto afectada por cuestiones externas. Al final, deshacerse de una imagen negativa puede ser realmente complicado.

 

Esto puede ocurrir por accidentes en el espacio laboral que fueron manejados incorrectamente, por una campaña que transmitió un mensaje inapropiado, por denuncias públicas sobre la vida dentro de la empresa, entre otras causas.

 

¿Cómo solucionar este problema?

 

Una estrategia común entre las empresas que han generado un impacto negativo entre sus consumidores es crear una nueva imagen corporativa, bajo un nombre diferente e incluso una razón social distinta. A pesar de que esto puede hacer que comiences de nuevo con frescura, realmente no estás cambiando la imagen de tu marca, sino creando una nueva.

 

Otra forma honesta de afrontar una situación como esta es reconocer aquello que tu empresa omitió y actuar a partir de ello para retribuir a los clientes, ya sea lanzando una campaña de disculpa o haciendo público un programa de capacitación para ti y tus colaboradores, reestructurando áreas y personal, o haciendo un rebranding. Esta labor puede resultar más lenta, pero los frutos que coseches serán mejores que comenzar desde cero.

 

6. Problemas de calidad

 

Toda empresa debe tener por objetivo ofrecer una experiencia única a los clientes, dar un servicio inigualable o vender productos con la calidad esperada por los consumidores. Por ello, cuando algo limita la capacidad de una empresa para ofrecer estas cualidades en sus servicios y productos se encontrará en una situación comprometedora.

 

Veamos cómo algunas situaciones pueden comprometer los estándares de una empresa e impactar en la percepción de calidad de sus ofertas, así como la forma de afrontarlas.

 

Incumplimiento de los proveedores

 

Las relaciones de negocios se basan en la confianza. Esto es especialmente cierto cuando hablamos de personas que no pertenecen a la empresa, pero que inciden en diferentes procesos de ella, tales como los proveedores.

 

Estos agentes externos suelen abastecer a una empresa de materias primas o de servicios, procesar insumos o encargarse de la distribución de mercancías. Pero cuando una de estas empresas externas pasa por algún problema puede poner en riesgo la cadena productiva de sus clientes, generando afectaciones en sus tiempos de entrega, calidad y resultados.

 

¿Cómo solucionar este problema?

 

Una empresa nunca debe depender al 100 % de un único proveedor. Al final los proveedores son empresas externas que también están expuestas a situaciones que pueden limitar su capacidad de cumplir con el servicio contratado. Pero incluso si tomas acciones por el incumplimiento, sencillamente no puedes detener tu producción.

 

Una buena forma de mantener el control de tus operaciones externas es contratar a más de una empresa externa para llevar a cabo diferentes procesos de tus actividades. Esto hará que cuentes con un apoyo en caso de incumplimiento de algún proveedor.

 

Asimismo, se recomienda contar con una lista de proveedores certificados o que cumplen con los estándares de tu industria para apoyarte en situaciones complejas en el futuro.

 

Falta de estándares

 

Una de las principales tareas de toda empresa es asegurarse de ofrecer una oferta homogénea. Esto significa que un cliente debe recibir la misma experiencia en cada ocasión, que los productos tengan la misma calidad y que los servicios funcionen correctamente siempre.

 

Cuando esto no ocurre, generalmente tiene que ver con un cambio o deficiencia en tus procesos. Y muchas veces es consecuencia de la falta de manuales de procedimientos o de estándares para fabricar y evaluar cada producto o servicio ofertado.

 

¿Cómo solucionar este problema?

 

La forma más simple de solucionar este inconveniente es mediante la creación de manuales de procedimientos precisos para cada tarea y gestión dentro de tu empresa. No importa qué tan simple sea el proceso; si no logras estandarizarlo abres la puerta a malas prácticas o errores humanos.

 

Esta estrategia debe ir acompañada de un esfuerzo de capacitación para todo tu personal y de la creación de programas y manuales para adiestrar a las futuras incorporaciones de tu plantilla.

 

7. Problemas de recursos humanos

 

La gestión de talentos dentro de una empresa es una tarea realmente complicada. Los departamentos de RH por lo común tienen que manejar asuntos administrativos relacionados con la nómina, resolver asertivamente conflictos personales, diseñar programas de integración y analizar el comportamiento y desempeño de los trabajadores.

 

Veamos algunos de los problemas más comunes a los que se enfrentan los responsables de esta área y la forma en la que son solucionados.

 

Ausentismo laboral

 

Cuando un trabajador se ausenta de sus labores crea una reacción en cadena cuyo resultado es la baja productividad de los equipos y la pérdida de ingresos significativos para las empresas. El ausentismo de un trabajador puede costar mucho al año.

 

¿Cómo solucionar este problema?

 

Amonestar a los empleados mediante descuentos a su salario, llenar actas administrativas o exigir que se presenten a laborar no son de ningún modo formas de solucionar el ausentismo laboral. Por el contrario, genera un ambiente en el que se sentirán menos dispuestos a trabajar.

 

Para solucionar este problema lo primero que debes hacer es identificar sus causas: ¿el ambiente no es propicio para trabajar?, ¿preferirían tus empleados laborar desde casa?, ¿estás dándoles un sueldo justo?, ¿el empleado atraviesa un conflicto personal o de salud que le impide cumplir con sus compromisos? Solo en la medida en que identifiques los motivos detrás de la inasistencia de los empleados podrás crear estrategias para motivarlos a asistir. 

 

Falta de personal experto

 

Una seria limitación para cualquier empresa es la falta de personal capacitado para la realización de tareas especializadas. Si quieres tener un restaurante de comida italiana, será un serio problema no contar con un chef especializado en la gastronomía de la península itálica. Esto mismo aplica para cualquier rubro o sector de negocios.

 

Cuando una empresa pasa por esta situación se vuelve evidente en los resultados o en la incapacidad para dar respuesta a las necesidades del mercado.

 

¿Cómo solucionar este problema?

 

Si no se cuenta con personal experto, lo que hay que hacer es encontrarlo y sumarlo al equipo. El problema radica en que no todas las empresas cuentan con los recursos necesarios para contratar personal especializado para cada función empresarial. 

 

Para sortear este obstáculo las empresas pueden hacer una lista de prioridades y destinar recursos para cubrir el sueldo de personal con un buen nivel de experiencia o capacitar al personal ya existente. Otra opción consiste en adquirir herramientas de software que lleven a cabo labores especializadas, ya sean contables, de procesos, para recursos humanos o incluso de gestión empresarial.

 

8. Problemas de toma de decisiones

 

La proactividad es una de las mejores habilidades que alguien puede tener dentro de una empresa. Y no solo en lo que respecta a los líderes, sino a cualquier miembro de la organización. A fin de cuentas, cuando alguien tiene la capacidad de actuar por iniciativa propia e identificar dónde pueden ser útiles sus habilidades es un talento invaluable.

 

Por ello, cuando una empresa no cuenta con personal con dicha cualidad pueden surgir problemas para tomar decisiones óptimas. Veamos algunos de los escenarios más comunes.

 

Falta de liderazgo

 

La falta de liderazgo ocurre cuando un equipo de trabajo no cuenta con una figura que los dirija y oriente hacia un objetivo común; o bien, cuando esta figura existe, pero no cumple adecuadamente con sus funciones. 

 

Esto puede ocurrir porque el líder de equipo no cuenta con las habilidades para gestionar tareas, comunicar claramente sus ideas o administrar los talentos del personal. Las consecuencias pueden ser baja en la productividad, ambientes de trabajo tóxicos o incluso la fuga de talentos.

 

¿Cómo solucionar este problema?

 

La solución a este problema tiene que ver con la capacidad que tiene una empresa para evaluar a su personal. Lo mejor es elegir como líder de proyecto o de departamento a aquel que tenga las mejores habilidades para gestionar los talentos de sus colaboradores. 

 

Muchas veces las empresas otorgan puestos de liderazgo con base en los años de experiencia de un trabajador o por su trayectoria académica, pero esto no siempre significa que será un buen líder. Para asegurarte de que has tomado una buena decisión puedes crear políticas de cumplimiento y evaluar constantemente a tu personal.

 

Falta de oportunidades

 

La falta de oportunidades es una limitación percibida por los empleados que buscan crecer profesionalmente o desean asumir mayores responsabilidades. Por temor al error, muchos líderes no permiten que los trabajadores tomen decisiones, presenten propuestas u opinen. Esto inevitablemente ocasiona un ambiente de frustración y estancamiento; además siembra la idea de que el líder o la compañía no quieren que los empleados crezcan y aprendan. 

 

¿Cómo solucionar este problema?

 

La mejor forma de enfrentar este problema es mediante la delegación de responsabilidades dentro de los equipos de trabajo de forma individual y colaborativa. Si tu empresa debe entregar un proyecto de marketing de contenidos, lo mejor es que asignes esta labor a un equipo de trabajo y le des la capacidad de autogestionarse de acuerdo con las guías que has proporcionado. 

 

Ten en cuenta que el 85 % de los empleados no sienten una conexión significativa con las empresas para las que trabajan. Si les das un propósito y le haces saber lo valiosos que son para ti, los miembros del equipo sentirán que están contribuyendo con sus talentos y explotando asertivamente su creatividad, y serán más leales a tu empresa.

 

9. Problemas de productividad

 

Todos queremos tener una empresa altamente eficiente. Pero gestionar la productividad no es una tarea sencilla. Para generar un ambiente de trabajo prolífico es necesario equilibrar las necesidades de la empresa con las capacidades del personal, así como los tiempos de trabajo intenso con los momentos recreativos y de descanso. 

 

Cuando alguno de estos elementos tiene más peso en la balanza pueden surgir problemas serios para las compañías. Revisemos algunos de ellos.

 

Sobrecarga de funciones

 

Hasta hace unos años se solía creer que cuanto más tiempo trabajara una persona y cuantas más actividades se le asignaran, mayor sería su productividad. Pero hoy en día el paradigma ha cambiado y, en realidad, cuando se exige demasiado a un empleado lo más seguro es que termine exhausto o con burnout.

 

La sobrecarga de funciones puede traer consigo baja en la productividad, errores humanos recurrentes y deficiencia en la calidad  de las ofertas de una empresa. Además, puede crear un ambiente de trabajo tóxico, basado en la competencia, que afecta el ambiente y la  cultura laboral.

 

¿Cómo solucionar este problema?

 

Actualmente, más del 90 % de los líderes empresariales reconocen que no se puede exigir productividad si no se equilibra adecuadamente con el descanso, por lo que han promovido el descanso dentro de sus espacios de trabajo, debido que dar tiempos de esparcimiento ha demostrado incidir positivamente en la eficiencia, ánimo y bienestar de su personal.

 

Para evitar la sobrecarga de funciones es recomendable que promuevas una cultura del descanso, permitas la flexibilidad laboral e incentives la desconexión durante los fines de semana. Tus empleados lo agradecerán y tu compañía verá mejores resultados.

 

Falta de ánimo

 

Este es un problema al que es realmente común que se enfrenten las empresas. Ya sea por cuestiones sociales o personales, por situaciones cotidianas o por problemas dentro del espacio de trabajo, es normal que los empleados no manifiesten disposición a trabajar o que estén desmotivados.

 

Ante este tipo de conductas, no debes quedarte con los brazos cruzados. Por el contrario, es importante que actúes para evitar bajas en la productividad y conflictos entre pares.

 

¿Cómo solucionar este problema?

 

Hoy en día, las empresas que asumen su papel en la promoción de la salud mental de sus trabajadores son las que mejor reputación tienen y las que se vuelven más competitivas en el mercado laboral. Ofrecer programas de salud mental a los empleados tendrá un efecto positivo en su vida personal y esto influirá en la forma en que trabajan.

 

Paralelamente, puedes ofrecer incentivos de forma regular para que tus empleados tengan una motivación extra para dar más de sí mismos. Solo será importante que esto no derive en una competitividad tóxica. 

 

10. Problemas de satisfacción al cliente

 

Por último, hablaremos de un tipo de problemas con el que las empresas tienen que lidiar en su día a día y tienen que ver con los consumidores. Muchas veces no tienen que ver con las ofertas de la empresa ni con la calidad de sus servicios. Sin embargo, cualquier compañía debe saber responder a las demandas de los clientes ya que, al final del día, son ellos el motor de las organizaciones comerciales. 

 

Veamos algunos problemas comunes de satisfacción al cliente y las formas en que una empresa puede actuar para mitigar sus efectos. 

 

Reclamaciones

 

Las reclamaciones son el pan de cada día de las empresas. Llamadas telefónicas, correos electrónicos, mensajes a través de redes sociales y hasta visitas a las oficinas de una empresa son los medios más comunes que utiliza un cliente insatisfecho para conectar con tu marca y obtener una respuesta.

 

Las reclamaciones suelen costar tiempo, esfuerzo y dinero a las empresas, pero no por eso se les debe ignorar. De hacerlo, puedes generar una mala imagen de tu empresa, descontento y malas reseñas que afectarán el modo en que eres percibido por tu audiencia. 

 

¿Cómo solucionar este problema?

 

No hay mejor forma de afrontar la reclamación que dando respuesta inmediata a la solicitud del cliente. Si necesita un reemplazo y cuenta con su garantía, gestiónalo. Si quiere hacer una devolución, permítela. Te sorprenderás al saber que muchas veces basta con escuchar al cliente para que este dé por terminada su reclamación. 

 

Para hacer que tu atención al cliente sea más eficiente y mantengas encantados hasta a quienes presentan una reclamación, puedes apoyarte en sistemas de CRM, chatbots o diferentes plataformas de comunicación que te mantengan activo 24/7 y den una rápida respuesta a tus clientes.

 

Malas reseñas

 

Una mala reseña por parte de un cliente puede parecer un detalle menor. Podrías pensar que no representa un problema serio, cuando otros tantos te recomiendan ampliamente. Pero piensa en esto: un cliente insatisfecho podría influir a 10 personas, a 50 o incluso a miles. ¿Cómo? Muy fácil: a través de redes sociales o de comentarios en Google Maps.

 

Estas reseñas pueden poner en jaque tu buena reputación. Sobre todo cuando sabemos que 49 % de los consumidores confían en las reseñas publicadas en línea, incluso cuando son de personas desconocidas. 

 

¿Cómo solucionar este problema?

 

La mejor forma de afrontar estas situaciones es sincerándote con tu público. Si un cliente se ha sentido insatisfecho con tu servicio y lo ha publicado en línea, puedes responder a su publicación pidiendo más detalles, disculpándote o solicitando un medio de contacto para mantenerte en comunicación y resolver la inconformidad.

 

Esto hace que los demás clientes sean testigos de tu interés en satisfacer a cada uno de tus compradores, lo que los hará sentir apreciados y parte de tu marca.

 

 

 

Ahora que sabes a qué problemas puedes enfrentarte como empresa, estás listo para prevenir. Recuerda que en los negocios siempre debes estar un paso adelante para responder de forma adecuada y superar cualquier reto que se te presente.